lunes, 21 de febrero de 2011

Me cuesta abrir los ojos y lo hago poco a poco.

Cuando veo llover imagino que la lluvia escribe sobre el suelo miles de frases…siempre distintas porque siempre llueve distinto.
Y me imagino que puedo pedir un deseo, elegir una de las miles de frases que las nubes escriben en el polvo y que ese deseo se convertirá en realidad.

domingo, 13 de febrero de 2011

Y

-Pero díselo.
-¿El qué?
-Que la quieres.
-Ni hablar, su avión sale esta noche.
-No tienes nada que perder, y te arrepentirás si no lo haces. Yo nunca se lo dije lo suficiente a ella. Tendría que habérselo dicho cada día, porque era perfecta cada día. Las películas no se acaban hasta que sale la palabra fin.

jueves, 10 de febrero de 2011

Don't you dare act like you don't know.

Yo te prometo un para siempre, ¿tú me lo prometes?
-Eso es demasiado tiempo, todo se puede torcer y podemos acabar odiándonos.
-Bueno, aunque te odie, si me necesitas iré.
-No lo creo...si me odias no me querrás ver...
-Pues cierro los ojos.
-No me querrás oír.
-Pues no te dejaré hablar...
-¿Entonces?
-Te abrazaré y te diré...¿Te acuerdas de aquella tarde que te prometí un para siempre? Lo decía en serio.

miércoles, 9 de febrero de 2011

domingo, 6 de febrero de 2011

Tengo personalidad adictiva y tú eres mi sustancia preferida.

Yo no quiero equivocarme, tampoco seguir esta mentira… pero aún siento lo mismo por ti, por muy difícil que parezca, no te he olvidado, todos lo sabemos.
Con todo lo que he pasado y todo lo que has hecho… y sigues aquí, en un rinconcito que no pasa desapercibido por mis sentimientos.

jueves, 3 de febrero de 2011

Ella es ella entre un millón, me dijo.

Y en ese momento la ves, y la miras, y pasas cerca y te roza con el brazo, y nadie más lo ve, pero tu carne está de gallina y estás a punto de sonreír como un verdadero gilipollas. Pero al pasar y reconocer su olor te vuelves loco del todo, y al darte la vuelta para decir algo sólo se te ocurre un “encantado de haber coincidido contigo en esta vida”, al tiempo que tu corazón lucha por salirse de tu pecho y tiemblas tanto que en cualquier segundo caerás rendido a sus pies.